EE.UU. contribuirá con 3.000 millones dólares lucha contra cambio climático
Brisbane (Australia), (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció la donación de 3.000 millones de dólares (2.395 millones de euros) a un fondo de la ONU creado para asistir a los países en desarrollo a afrontar los efectos del cambio climático.
«Estoy anunciando que Estados Unidos ha dado otro paso importante. Vamos a contribuir con 3.000 millones de dólares al Fondo Verde para el Clima de forma que podamos ayudar a las naciones en desarrollo», dijo Obama en el discurso que pronunció en la Universidad de Queensland, en Brisbane, antes de participar en la cumbre del G20.
«Esto nos ofrece la oportunidad de ayudar a la comunidades vulnerables con sistemas de alerta, con defensas más fuertes contra las tormentas y con infraestructuras más resistentes al clima», destacó el mandatario.
EL Fondo Verde para el Clima de las Naciones Unidas fue creado para gestionar las transferencias de los fondos para que los países que son vulnerables al cambio climático, entre ellos los del Pacífico Sur, puedan hacer frente a las consecuencias del cambio climático y prevenir su agravamiento en el mundo.
«Junto a las otras naciones que ya lo han respaldado, nos da la oportunidad de ayudar a las comunidades vulnerables con un sistema de prevención temprana, con defensas más fuertes contra el surgimiento de las tormentas y una infraestructura más resistente al clima», acotó.
El presidente estadounidense también abogó así por la transición «a una economía de energías verdes que les permita crecer, crear trabajos y al mismo tiempo reducir la contaminación de carbono».
El anuncio de la ayuda surge la misma semana en la que Estados Unidos y China alcanzaron un acuerdo histórico sobre cambio climático.
En virtud del mismo, Estados Unidos reducirá sus emisiones para 2025 entre un 26 y un 28 por ciento con respecto a los niveles de 2005, lo que supone el doble del recorte previsto entre 2005 y 2020.
Por su parte, el presidente chino, Xi Jinping, se comprometió a que el volumen de emisiones de efecto invernadero de su país alcanzará su nivel máximo en 2030 para comenzar a reducirse y que ese mismo año un 20 por ciento de la energía nacional producida procederá de fuentes limpias y renovables.
Obama instó a las naciones a establecer un objetivo para reducir las emisiones y mirar con objetividad los datos científicos y «alcanzar un fuerte acuerdo global el próximo año».
El primer ministro de Australia, Tony Abbott, se ha resistido a que la cumbre del G20 aborde el tema del cambio climático por considerar que se centra en el crecimiento y los empleos, pero hoy Obama recordó que la Gran Barrera de Coral está en peligro y espera que siga existiendo para cuando él, sus hijas o sus nietos vuelvan. EFE