Cuba descongela la iniciativa privada y lanza nuevas reglas

LA HABANA.El gobierno cubano descongeló la prohibición para obtener nuevas licencias de trabajos independientes del Estado, un año después de que suspendiera las autorizaciones para nuevos emprendimientos privados.

La reapertura y una reorganización del incipiente sector no estatal en la isla se realizará a partir de diciembre, indicaron el martes medios de prensa oficiales que publicaron sus reportes al unísono con una treintena de disposiciones en la Gaceta Oficial.

Se especificó además que se permitirá solo el ejercicio de una actividad por persona y en el domicilio que radique la inscripción por lo que, por ejemplo, quienes renten sus casas a turistas no podrán ofrecer allí servicios gastronómicos.

Igualmente se unificaron las 201 actividades autorizadas en 123 agrupando algunas que antes aparecían dispersas como manicuristas, peluqueros y barberos en actividades de belleza.

“Esperaba que nos respetaran a quienes tenemos más de una licencias desde mucho antes. Claro que me perjudica porque reduce mi actividad”, dijo a The Associated Press, Camilo Condis, quien tiene un departamento en renta y está además inscripto como trabajador contratado por un paladar, como se conoce a los miles de restaurantes privados. “Este tipo de cosas solo llevan a irregularidades y corrupción, pues la mayoría va a seguir operando”.

Cuba abrió en 2010 un espacio a los emprendedores en rubros que antes eran potestad casi exclusiva del Estado por lo que hubo un florecimiento de bares, restaurantes, casas de alojamiento para turistas, pequeños talleres, dulcerías y todo tipo de negocios. Medio millón de personas obtuvieron sus licencias.

El argumento de las autoridades para dar espacio a los emprendedores fue fomentar la productividad y aliviar la economía de un Estado sobredimensionado con fuertes dificultades en un país sometido a sanciones por parte de Estados Unidos.

Sin embargo, las autoridades frenaron a mediados del año pasado la entrega de nuevas licencias en los sectores que habían sido más exitosos como la renta de casa -que se dispararon en paralelo a un auge del turismo- o los permisos para taxis y transporte, tras considerar que el crecimiento había rebasado las posibilidades de control provocando ilegalidades como el desvío de productos estatales para abastecer al sector privado e irregularidades impositivas.

La paralización fue considerada por críticos como una falta de voluntad de profundizar la apertura económica por parte de un modelo que por décadas priorizó la gestión estatal, sea para la producción o para brindar servicios para la población.

Las inquietudes sobre la forma en que se implementarán los cambios alcanzaron a muchas familias que en los últimos años vieron incrementar sus ingresos mediante el trabajo por cuenta propia.

“Mi esposo se quedará con la licencia de taxi y entregará la de dos habituaciones que renta”, explicó a la AP Yaneli García. “Yo mantendré los cuartos que alquilo en mi propia casa… en cambio no podré abrir el bar que proyectaba”, agregó la mujer dueña de un hostal en la ciudad de Santa Clara.

La viceministra de Trabajo, Marta Elena Feitó Cabrera, aseguró a medios de prensa locales que el objetivo de las nuevas normas no es impedir la actividad no estatal pero tampoco permitir que un dueño tenga varios negocios.

En reiteradas ocasiones, primero el expresidente Raúl Castro y luego su sucesor Miguel Díaz-Canel indicaron que esperan que la apertura económica se realice sin una acumulación de riqueza de los nuevos empresarios que fomente la desigualdad social.

Incluso con la apertura del trabajo independiente cerca del 80% de los empleos en Cuba son estatales con sueldos que se fueron incrementando pero pueden oscilar al equivalente entre 20 y 50 dólares mensuales, a los que se suman un conjunto de prestaciones y subsidios a la salud, la educación, la alimentación o los servicios domésticos. Además hay una cantidad no especificada de millones en remesas de cubanos en el extranjero.

Las regulaciones van acompañadas también de nuevas normas tributarias y fiscales, entre ellas la obligatoriedad de algunos rubros de contar con cuentas bancarias para transparentar sus ingresos y egresos.

 

Andrea Rodríguez está en: www.twitter.com/ARodriguez AP

AGENCIA  AP