Iván el Terrible

Por Fernando A. De León
Aunque en lo político y económico los dominicanos tenemos sentidos avances, en Nueva York, los que residimos por décadas en esta urbe sabemos que inmigrantes de otras regiones latinoamericanas, nos consideran escandalosos, prepotentes y arrogantes.
Lo malo de esto es que esas supuestas inconductas, también podría lacerar el profesionalismo de los periodistas dominicanos debido a que, un conductor de un programa de entretenimiento, trató con descortesía y arrogancia a una colega de nuestra área.
Recientemente, el conductor del Show del Mediodía, Iván Ruiz, a quien podríamos denominar como el Terrible por la petulancia narcisista que le caracteriza, y su escasa inteligencia emocional, dispensó un trato desconsiderado a una periodista salvadoreña cuando la llamó parcializada, al ésta no coincidir con las políticas públicas del gobierno que encabeza Nayib Bukele.
Además con sus intolerantes emociones, interrumpía constantemente a la comunicadora llamada Glenda que, entre otras cosas, dijo que Bukele viola derechos fundamentales de su pueblo y no le ofrecía entrevistas a los medios que no coinciden con su estilo de gobierno.
Aunque solo vimos un trozo de esa entrevista, pudimos oír cuando la periodista le dijo que no había necesidad de gritarle, y advirtió que se retiraría de la entrevista, conectada con El Salvador.
Al margen de que se esté de acuerdo o no con las embestidas que ha emprendido el mandatario salvadoreño contra la delincuencia, consideramos que para disentir de las opiniones de cualquier periodista de ese país u otro de nuestra región, se debe guardar cierto comedimiento y prudencia, sobre todo, a través de la pantalla chica.
En sus argumentos, Iván nunca dice que no es periodista; que es un simple animador y conductor de un programa de entretenimiento. Tratando de aparentar que es sensato y sincero, cuando la periodista protestó por él tratar de avasallarla, le dijo: “así somos”. Podría entenderse que todos los periodistas dominicanos, somos irrespetuosos.
No conforme con dar un mal trato la comunicadora extranjera, al finalizar la entrevista, le falta al respeto otra vez a la periodista Ivonne Ferreras, al enrostrarle que su conducta profesional, guarda parecido con su colega salvadoreña.
El autor es periodista, miembro del CDP en Nueva York, donde reside.